Sala 2ª de lo plagiario
Han sido vistas las diligencias seguidas contra D.
Víctor M. Muñoz Gamito y ha sido probado y así se declara como:
HECHOS PROBADOS
PRIMERO: Que D.
Víctor M. Muñoz, profesor de enseñanza secundaria, efectuó el pasado día cinco de
febrero el pago de su matrícula para el taller de creación literaria que
imparte D. Javier Mije, licenciado en Teoría de la Literatura y Literatura
Comparada, en la planta superior de la Mercería Café Cultural, sita en calle
Regina nº 4. Ítem más: D. Víctor M. Muñoz apoquinó (es decir, pagar o cargar, generalmente de mala gana,
con los gastos que a uno mismo le corresponden, según el diccionario de la
RAE) una mensualidad de sesenta euros que había pensado invertir en varias
botellas de alcohol, coca-colas y bolsas de hielo Pingus.
SEGUNDO: Que
D. Víctor M. Muñoz asistió a las tres primeras sesiones del taller de creación
literaria, estuvo atento a las explicaciones del profesor y entregó siempre
dentro del plazo establecido las tareas encomendadas cada miércoles al
finalizar la clase, si bien la calidad de las mismas dejaba mucho que desear y
provocó glaucoma primario y otitis interna a los asistentes del taller que las
leyeron.
TERCERO: Que D. Víctor M. Muñoz llamó por teléfono
durante los días veintidós y veintitrés de febrero a su amigo y compañero en el
taller D. Pablo Macías para comunicarle la angustia que sentía al no conseguir realizar
el ejercicio de esa semana. Dicho ejercicio consistía en llevar a la práctica
el concepto de “desfamiliarización” estudiado en la última sesión. Ítem más: el
estado de nerviosismo de D. Víctor M. Muñoz derivó en trastornos de ansiedad,
agorafobia, encefalitis y glosolalia: “durante los quince minutos que duró
nuestra última conversación, solo acertaba a pronunciar frases inconexas y
palabras sueltas como mierdra, Pierre Menard, monje o culo”, ha
declarado el sufrido amigo D. Pablo Macías.
CUARTO: Que D. Víctor M. Muñoz, preso del pánico
(que aumentaba porque solo escribía sintagmas trillados como “preso del
pánico”), decidió resolver su lamentable estado de crispación plagiando la obra
de Rafael Reig Visto para sentencia,
publicada en dos mil ocho por Caballo de Troya, un sello de Random House
Mondadori, S.A.
FUNDAMENTOS DE DERECHO
Los hechos probados son constitutivos de los delitos
de atentado contra la salud pública y de plagio deliberado con la atenuante de locura
transitoria. El derecho a la formación continua del profesorado está recogido
en el DECRETO 93/2013, de 27 de agosto, por el que se
regula la formación inicial y permanente del profesorado en la Comunidad
Autónoma de Andalucía, así como el Sistema Andaluz de Formación Permanente del
Profesorado (BOJA 30-08-2013).
Sin embargo, este tiene límites y nunca debe ser permitido
si con ello se conculca el derecho de las demás personas a una vida feliz y
libre de plúmbeos y espesos cagatintas. Por otra parte, este tribunal reconoce
el derecho de todo escritor a inspirarse libremente en la obra de cualquier
otro para componer la suya propia. Podría citarse como ejemplo a este respecto
el Ulises, de James Joyce, novela que
este tribunal reconoce haber leído saltándose páginas, (incluso capítulos). Pero
se abandona el terreno resbaladizo de la libre inspiración y se incurre en la
cenagosa senda del plagio cuando se lleva a cabo por parte del autor una copia
sustancial de la obra ajena y existe además la intencionalidad de presentarla
como propia, hechos que concurren en el caso que nos ocupa.
ACUERDO
Que debo condenar y condeno a D. Víctor M. Muñoz,
como autor de un delito de atentado contra la salud pública, a la pena de
asistir durante nueves meses y un día a talleres sobre manejo de redes sociales
para dummies, cursos de cocina
italiana para principiantes y clases sobre Cómo aprender a ser Canal de Energía
Reiki, prohibiéndosele el derecho a inscribirse en cualquier taller de creación
literaria que se imparta en la provincia
de Sevilla durante al menos dos años.
Que debo condenar y condeno a D. Víctor M. Muñoz,
como autor de un delito de plagio, a la pena de leer y luego copiar a mano La cruz de San Andrés, de Camilo José
Cela, Estación de Infierno, de Lucía
Etxebarría y Sabor a Hiel, de Ana
Rosa Quintana.
Contra esta resolución cabe interponer recurso de
apelación en el plazo de siete días ante el juzgado digital de segunda
instancia.
Así lo pronuncio, mando y firmo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario